La existencia de los robots ya no nos sorprende. Desde las líneas de producción en masa hasta los proyectos de exploración espacial, los robots se usan en diversos campos para realizar tareas que requieren de máxima precisión. Asimismo, algunos robots ya se han programado para llevar a cabo minuciosas intervenciones quirúrgicas.
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Las máquinas son tan exactas, que realizan el mínimo absoluto de incisiones, reducen la carga de trabajo e incluso mejoran la precisión de las cirugías. También, reducen el riesgo de problemas posoperación: infecciones, pérdida de sangre y cicatrices, lo que las hace una herramienta muy deseada en hospitales. Hasta el momento, se han realizado 7.2 millones de cirugías con robots en 67 diferentes países.
Los primeros indicios de la cirugía robótica datan de los 70, cuando la NASA exploraba la idea de las “telecirugías”, o sea cirugías a distancia. Lo que buscaban los científicos era poder colocar una máquina con herramientas quirúrgicas en el espacio y controlarla con la ayuda de un cirujano en la Tierra. Después, fueron los investigadores de DARPA (la Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa) quienes retomaron el interés, en esta ocasión para crear máquinas que pudieran operar soldados a distancia durante las guerras.
Los robots cirujanos y sus primeras suturas
El concepto de la cirugía robótica se ideó desde 1967. Desde entonces, esta tecnología se ha desarrollado enormemente y ha tenido numerosas innovaciones.
El primer robot cirujano fue Puma 560, construído en 1985 para realizar una biopsia cerebral, que en pocas palabras, consiste en insertar una aguja en el cerebro de alguien. Fue la primera cirugía de este tipo que se realizó, el objetivo era volver todo el proceso más seguro, pues antes estaba sujeto a un posible error humano.
Después, la Universidad Imperial de Londres se encargó de crear al PROBOT, una máquina que realizó una resección transuretral de la próstata. ¿En español? Retiró tejido enfermo del cuerpo de un paciente. Luego, en 1992 y de la mano de Integrated Surgical Systems Inc. e IBM, vino el ROBADOC. Con su ayuda, se logró reemplazar la cadera de una persona y ganó la aprobación del sistema de salud europeo.
La cirugía robótica hoy
El éxito de los robots cirujanos despertó la imaginación de miles, que se preguntaron hasta dónde podríamos llegar. Anteriormente no se usaba el laparoscopio y por tanto las operaciones tomaban mucho tiempo y resultaba difícil para el cirujano que controlaba la máquina. Te preguntarás qué rayos es un laparoscopio, pues es una especie de minicámara que se inventó en los 90 y se usa para ver el interior del paciente.
Desde aquella época, se buscó que las operaciones tuvieran el mínimo de intervenciones invasivas. Al final de la década, se habían inventado tres sistemas clave: el Sistema Quirúrgico da Vinci, el AESOP y el sistema quirúrgico ZEUS.
Este último realizaba las más minuciosas cirugías en las partes más delicadas del cuerpo humano, como el aparato reproductor y el corazón. Se utilizó con 28 diferentes herramientas quirúrgicas y en el año 2000, lo aprobó la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU., más conocida por sus siglas en inglés: FDA. Al cabo de tres años, Computer Motion, la empresa que lo producía, lo descontinuó. El Sistema Quirúrgico da Vinci fue el que dominó el mercado en los años siguientes. A pesar de que siga siendo el más utilizado, muchos nuevos negocios están empezando a alimentar cierta competencia, trayendo innovaciones frescas en
¿Y qué tiene que ver la programación?
Tal vez no lo habías pensado, pero los robots cirujanos deben programarse para poder moverse. Sus brazos tienen sensores táctiles que dan retroalimentación al cirujano y le permiten controlarlo y sentir como si él estuviera operando directamente.
Definitivamente, se trata de una de las innovaciones más impresionantes de nuestro tiempo. Con todo lo que falta por descubrir, los cirujanos y los expertos predicen que en el futuro, esta tecnología seguirá trayendo incontables beneficios.
Si quieres seguir aprendiendo, te invitamos al blog de BYJU’s FutureSchool (: ¡Y no olvides dejarnos tu opinión en los comentarios!